Ridley Scott y James Cameron. Mucho se ha debatido acerca de ellos... y mucho se seguirá debatiendo. ¿Quién es mejor director de los dos? Esa no es la cuestión difícil. La pregunta compleja es: ¿quién ha aportado más a la historia del cine? "Blade Runner" frente a "Avatar", "Thelma y Louise" frente a "Titanic", "Gladiator" frente a "Terminator"... y, por supuesto, "Alien" frente a "Aliens".
"Alien, el octavo pasajero", film de terror-ciencia ficción de extraordinaria ejecución y precursor de innumerables películas posteriores.
El Bicho, de dimensiones considerables, con una mándibula mecánica doble o triple y ácido corrosivo en lugar de sangre, dotado de una agilidad y una fuerza poco comunes a la vez que inteligente y despiadado.
Ocho humanos, tripulantes obreros de una nave minera, encerrados en ella con el Alien, sin nadie más, sin nada más. La suerte está echada...
Como anécdota mencionar que los personajes/actores iban muriendo en función de su importancia/popularidad del momento, hasta llegar al octavo pasajero: Ellen Ripley (Sigourney Weaver), una absoluta desconocida por aquel entonces.
¿Cuántas veces te has mantenido pegado a la silla sin poder moverte viendo una película? ¿Cuántas películas pueden conseguir eso?
"Alien" puede.
No se si es la mejor de las dos, pero por ser la primera si es la que más mérito tiene.
Primera película importante de Ridley Scott y tercera de su filmografía.
"Aliens, el regreso", también primera película importante de James Cameron y también tercera de su filmografía
Vuelve Alien, pero ésta vez en plural: Aliens. Si el Bicho daba miedo, ahora hay más, muchos más. Los humanos también han aumentado su número y en lugar de mineros son marines. Para equilibrar un poco el asunto.
Mejora el vestuario, el atrezzo, los decorados y los efectos, pero la novedad más importante nos la confiere el guión: los misterios acerca de la vida de los Aliens planteados en la primera parte son desvelados de forma original y verosímil, pues no se había planteado hacer una secuela, y le confieren al Bicho y al film humanidad y realismo; es más, la lucha final no solo resulta interesante por la pelea en sí, sino también porque es la lucha a muerte entre dos madres de distintas razas protegiendo a los suyos. Lo que le da una dimensión moral que intensifica el conflicto y, por tanto, la participación del espectador.